miércoles, 26 de noviembre de 2008

Aaaa que bonita es la navidad!!!!

México es reconocido por la gran diversidad de sus costumbres y tradiciones, México se ilumina cada año con la alegría de la Navidad y con las fiestas previascomo las posadas. LAS POSADAS: representan la peregrinación de José y María cuando huyen para escapar de la ley de Herodes y poner a salvo a su hijo que está por nacer, de manera que las “Nueve Estaciones” o “La Novena Navideña” se representan mediante nueve posadas. La primera se celebra el 16 de diciembre y la última el 24, en la Nochebuena.Por lo general, la posada inicia con el reparto de rústicas publicaciones de letanías y cantos para pedir posada entre los asistentes, también se reparten velas de colores y los participantes, organizados en una columna y con las velas de parafina encendidas, recorren un camino corto por el patio de la casa, vecindad o barrio siguiendo a dos niños o jóvenes que cargan una pequeña escultura colocada sobre un plato o charola. Dicha base se cubre con heno y musgo, sobre el que va la escultura de barro cocido o yeso policromado. Es la representación de María y José peregrinos. María suele ir montada en un burro y José camina por un lado. Quienes van con los peregrinos cantan la letanía, dirigida casi siempre por una mujer, hasta llegar a la puerta de la casa y solicitan posada a los dueños cantando los versos que son de dominio popular: En nombre del cielo,/ os pido posada,/ pues no puede andar/ mi esposa amada/. Luego, los dueños de la casa contestan desde el interior cantando los versos de respuesta: Aquí no es mesón,/ sigan adelante,/ pues no puedo abrir,/ no sea algún tunante/. Y sigue una serie de cantos donde se alternan los de afuera y los de adentro hasta que finalmente los de la casa abren las puertas para recibir a los peregrinos: Entren santos peregrinos, peregrinos,/ reciban este rincón,/ aunque es pobre la morada, la morada,/ os la doy de corazón/. Se apagan las velas, entran primero los que llevan a los peregrinos y detrás de ellos los demás invitados, colocan a los peregrinos en una mesa o cerca del nacimiento que se instala en las casas. Todos se hincan frente a los peregrinos y una persona dirige una serie de rezos, casi todos dedicados a la virgen María y al niño que está por nacer, con pocas referencias a José. Cuando termina la oración (momento muy esperado por todos, pero especialmente por los niños) se cantan unos versos como los que siguen: Ándale Tacho/ sal del rincón/ con la charola de la colación./ Ándale Andrés/ no te dilates/ con la canasta/ de los cacahuates. Todos salen al patio cantando y los habitantes de la posada (la casa) reparten canastitas, elaboradas de palma o papel crepé y cartoncillo u otros materiales, con la colación (dulces de azúcar pintados que se fabrican especialmente para estas fechas). Si el dinero no alcanza para la colación y las canastitas, se reparten bolsitas de papel de estraza con cacahuates, con todo y cáscara, que es más económico. Para esta hora todos están muy contentos, pero los niños más, porque es el momento de romper la piñata, por lo que cantan: No quiero oro/ ni quiero plata,/ yo lo que quiero/ es romper la piñata./ La piñata/ tiene caca,/ tiene caca,/ cacahuates de a montón./ Esta piñata/ es de muchas mañas,/ sólo contiene,/ naranjas y cañas. Las piñatas tradicionales son de olla de barro recubierta de capas de periódico y adornadas con papel de colores vistosos. La piñata más común era la estrella de siete picos con cintas de papel colgando de cada uno. El papel de china y el papel estaño metálico eran los que más se usaban para su decoración. Otras figuras tradicionales eran la zanahoria, el jitomate, la cebolla, la rebanada de sandía y la negrita no son esas de el monito de tu caricatura favorita. Las piñatas se llenan de frutas de temporada: tejocotes, naranjas, limas, cañas, cacahuates y jícamas. Luego los niños se forman para pegarle a la piñata, el niño en turno golpea la piñata mientras todos cantan : Dale, dale, dale,/ no pierdas el tino,/ mide la distancia,/ que hay en el camino, y al rompence !los niños corren para agarran la mayor cantidad de fruta que pueden¡. Y ya para finalizar la posada se reparten tamales y un rico y calientito ponche. LA NOCHEBUENA: En México, la Nochebuena constituye la culminación de ‘las posadas’.el 24 de diciembre se celebra la Nochebuena con la reunión de las familias extensas que incluyen a los abuelos, hermanos, tíos, primos, sobrinos, nietos, y suelen agregarse algunos familiares lejanos y amigos o vecinos. La reunión tiene el propósito de compartir una cena familiar especial preparada con esmero. Para la cena de Nochebuena en muchas casas se preparan platillos tradicionales de complicada elaboración para mi, como romeritos, bacalao, guajolote, ensalada de Nochebuena, ponche y postres como torrejas y buñuelos. Muchas familias acostumbran asistir a la misa de gallo que se celebra en las iglesias a las 24 horas del 24 de diciembre. A la misma hora, en otros hogares, una o dos personas, previamente elegidas como padrinos arrullan al Niño Dios que luego será colocado en el nacimiento, rezan y cantan alabanzas y arrullos. Posterior-mente, los asistentes se abrazan para desearse feliz Navidad y participan de la cena.
Lo que tampoco puede faltar de mencionar son los bonitos NACIMIENTOS: Los nacimientos son representaciones de la natividad de Jesús. En las casas de familias mexicanas más apegadas a las tradiciones se instala el nacimiento desde el 16 de diciembre, incluso algunos lo hacen desde el primero de diciembre. Estas representaciones son verdaderos ejemplos de creatividad y producción artesanal.El origen del nacimiento es atribuido por diversos historiadores a Francisco de Asís, quien construyó una casita de paja a modo de portal, puso un pesebre en su interior, trajo un buey y un asno de los vecinos del lugar e invitó a un pequeño grupo de gente a reproducir la escena de la adoración de los pastores. Las figuras para el nacimiento varían en número; sin embargo, un nacimiento debe incluir como figuras básicas las del portal: María, José, el niño, el ángel, la estrella de Belén, el buey y el burro. La cantidad y variedad de figuras de un nacimiento dependen de la creatividad de quien lo monta y la disponibilidad que tenga de materiales o figuras. Hay nacimientos que llegan a tener unas seiscientas figuras. Muchas familias tienen especial gusto para montar su nacimiento y cambian la escenografía cada año. Hay quienes adaptan mecanismos eléctricos e hidráulicos para que haya un lago, un río o una cascada, construyen montañas, barrancas, cuevas, casas y caminos con papel, piedras, ramas, espejos, varitas, palos, pequeños troncos, etcétera. También elaboran follajes para los árboles y arbustos con viruta, aserrín, telas, algodón, etcétera. Entre las figuras, además de las básicas, se incluyen pastoras y pastores, aguadores, arrieros, mujeres que cargan a sus hijos con un rebozo y llevan sobre la cabeza un cántaro con agua, una tina con ropa o comida, lavanderas a la orilla de un río, pajareros, vendedores de ollas de barro, leñadores, panaderos, vendedoras de flores y frutas, niños que ayudan a sus padres a cargar leña o agua, ancianos descansando en un banco o en una silla. Además de personas realizando muy diversas labores, no faltan los animales de corral, las aves y los peces. Y no podemos olvidar a personajes tan importantes como los Santos Reyes y hasta el mismísimo diablo pintado de rojo y negro, con todo y cuernos, cola y tridente, sentado en la orilla de un pozo, a la entrada de una cueva o al lado de un perol humeante sobre la fogata. Los nacimientos son verdaderas obras de arte, no sólo por la delicada elaboración de las figuras, sino por la escenografía que se diseña y construye para cada ocasión.
Y no me queda nada mas que desearles una !FELIZ NAVIDAD¡.